Noticias

La Universidad Americana impulsó la iniciativa “Abracitos que abrigan”, una actividad solidaria y formativa de la carrera de Diseño de Moda e Indumentaria

Fecha de publicación 31 - 07 - 2025

En el Hospital Materno Infantil de Santísima Trinidad se desarrolló el acto de entrega del proyecto de Extensión Universitaria “Abracitos que abrigan”, realizado por los estudiantes de la carrera de Diseño de Moda e Indumentaria de la Universidad Americana.

Este proyecto tiene como finalidad brindar apoyo a bebés prematuros internados en cuidados intensivos, mediante la donación de ropitas diseñadas especialmente para su condición, entre ellas mantitas, pañales y toallitas húmedas, demostrando el compromiso social de los estudiantes y la articulación de la carrera con necesidades reales de la comunidad.

Participaron 16 alumnos que prepararon 20 bolsos para las mamás que actualmente tienen a sus bebés en el área de Neonatología del Hospital. Cada bolso incluyó un kit a medida.

“Me gusta mucho cómo trabajan los alumnos de la Universidad Americana, estoy muy agradecida con ellos. Esta iniciativa de entregar ropitas es muy linda. Ver a nuestro bebé con su primera ropita me emocionó muchísimo. Es espectacular”, reveló María Virginia Aguilar Olmedo, mamá de Bruno.

Por su parte Sady Llanes, mamá beneficiada, declaró: “Es una causa muy buena para los niños que están en terapia. Me parece una idea espectacular que se hagan ropitas adaptadas. Ojalá se implemente siempre, porque los bebés necesitan abrigos, mantitas, cosas útiles que les sirvan”.

Proyecto “Mi primera ropita”

La Lic. Mirna Ayala, docente de la carrera de Diseño de Moda e Indumentaria, de la asignatura Moldería y Confección V Infantil, manifestó que se trata de un proyecto consistente en crear molderías adaptadas para bebés prematuros.

“Esto nace de una necesidad real, porque cuando los bebés salen de terapia intensiva, no hay ropita que les quede bien. Este trabajo es más que una práctica educativa, es una experiencia humana. Las alumnas no solo aprenden a coser, sino también a mirar con otros ojos la realidad de muchas mamás en nuestro país. No es solo una prenda, es la primera ropita de esos bebés, una obra de arte con mucho significado”, expresó la docente.

Asimismo, expuso que vivió esta situación en primera persona, por lo que la empatía se potencia. “Yo misma pasé por esta situación, y sé lo que es no tener ropa adecuada para un bebé prematuro. Por eso este proyecto me toca profundamente. Queremos que las mamás se sientan felices y acompañadas, y que los estudiantes vean el impacto real de su trabajo”, enfatizó.

La docente explicó que para llegar a estos resultados hubo una investigación previa para llegar al diseño, la medida y la tela adecuada. “Se crearon entre 3 y 4 prototipos, ajustando detalles hasta lograr el mejor resultado. De 17 diseños, elegimos uno que estaba más completo. Este proyecto se llama ‘Mi primera ropita’ de la Universidad Americana. Y estoy segura de que nunca se van a olvidar de eso”, describió.

Estudiantes satisfechos con el trabajo logrado

“Fue un proceso difícil y no a la vez. Aprendimos a trabajar en equipo mientras hacíamos el proyecto. Fue fácil porque sabíamos lo que queríamos lograr y cómo iba a impactar en las mamás. Lo hicimos con mucho cariño, para darles algo lindo en un momento difícil”, aseveró Pía Duarte, estudiante de quinto semestre de Diseño de Modas.

“El proyecto se llama ‘Abracitos que abrigan’. Lo hicimos en grupo, éramos 16. Tuvimos contratiempos con el diseño y la confección, porque no había muchas máquinas y todo lo hacíamos en la facultad. Pero sabíamos que el resultado iba a valer la pena. El kit incluye un bolso, 24 pañales para recién nacidos y prematuros, una mantita con gorrita, toallitas húmedas y un body con manopla y botones para facilitar el cambio”, significó Micaela Martínez, estudiante del sexto semestre.

Impacto social y construcción de valores

“Quiero decir que esta actividad me pareció muy interesante e innovadora. Dentro de todas las profesiones que tenemos, esta propuesta realmente llamó la atención de los jóvenes, que están iniciándose en una nueva carrera”, expuso la licenciada Gorgonia Martínez Palacios, trabajadora social del Hospital de Trinidad, con 18 años de antigüedad.

“Durante el proceso, seguramente hubo mucha interacción, investigación, cambios de horarios, trabajo en equipo, todo eso que no se ve desde el escritorio, pero que forma parte de una experiencia real. Y lo más importante: este proyecto también les aportó un grado de humanización, algo que necesitamos mucho en nuestro país”, ilustró.

Consideró que todo esto conlleva a un bagaje de experiencias para los estudiantes y el resultado fue muy prometedor. “Están trayendo contención y esperanza a las mamás y papás que tienen a sus bebés en terapia, con esa incertidumbre de si el bebé va a salir adelante. En esos momentos, un gesto de cariño, un minuto de atención, vale muchísimo”, remarcó.

Ver más noticias

Copyright Universidad Americana © 2024. All rights reserved.

Desarrollado por SZ Publicitaria